La planta de asfalto en El Riachuelo podría tener un “impacto en la calidad de vida de las personas que viven cerca”, según el documento ambiental

La planta de asfalto en El Riachuelo podría tener un “impacto en la calidad de vida de las personas que viven cerca”, según el documento ambiental

El ruido, el polvo y los gases generados durante la instalación y el funcionamiento de la planta de asfalto en El Riachuelo “pueden tener un impacto en la calidad de vida de las personas que viven cerca de estas áreas”. Así se recoge en el documento ambiental del proyecto, que actualmente se encuentra en exposición pública.

Este documento señala como el polvo y los gases “pueden afectar a la calidad del aire y del suelo, y pueden afectar la salud de la fauna y la flora”. Además, en el caso del ruido que se genere, este “puede afectar a la fauna y la flora, incluyendo cambios en el comportamiento, la alimentación, la reproducción y la migración de las especies”.

El redactor del proyecto de instalación considera que “aplicando las medidas correctoras establecidas que se vienen aplicando hasta el momento, más las propias inherentes a la propia planta de aglomerado, se entiende que la actuación que se plantea no producirá afección a los espacios de la Red Natura 2000 más cercanos, por lo que tiene un efecto Compatible”.

Para los promotores de la planta de asfalto el proyecto “no modificará las condiciones de sosiego público de los habitantes de la zona. Por otro lado, el tráfico de vehículos pesados ligado a la misma, tampoco modificará el bienestar social de los habitantes con respecto a la situación actual.”

En relación a las viviendas más cercanas a la cantera, las situadas al oeste de la Montaña Antonio José se reconoce que “se verán afectadas tanto por el funcionamiento de la planta como por el tráfico de vehículos pesados que diariamente se dirigen a la cantera a abastecerse de material”, pero se considera que “la generación de polvo y ruido será equivalente al actual.”

La empresa defiende que estos vecinos se han visto afectados por la actividad minera que hasta ahora se ha desarrollado y que las medidas correctoras aplicadas “minimizan hasta valores asumibles” el impacto de la actividad. “Hasta la fecha no ha existido ningún tipo de molestias ni a residentes ni a transeúntes por la zona o visitantes a La Cumbrecita”, concluyen.

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