El temprano anuncio ayer lunes, 6 de junio, del acuerdo entre PP y CC en Santa Cruz de La Palma y la firma unas horas más tarde del pacto regional que hará presidente del Gobierno de Canarias al nacionalista Fernando Clavijo, hacían presagiar que en los municipios donde la suma de ambas formaciones daba mayoría se anunciasen pactos de gobierno, algo que solo ocurrió en Villa de Mazo, con el apoyo de MAE, y en Garafía.

En Los Llanos de Aridane, donde CC ganó las elecciones, pero tiene el mismo número de concejales que el PP, nueve, sigue sin haber acuerdo. El conformar un grupo de Gobierno con 18 concejales sobre 21 y la presencia, o no, de la alcaldesa en funciones en el mismo, Noelia García, son cuestiones que las fuentes consultadas señalan que podrían dificultar el acuerdo.

En este municipio, el PSOE, con tres concejales, pueden ser también decisivo para conformar un gobierno municipal, sin descartarse tampoco que la fuerza más votada, CC, intente gobernar en minoría con apoyos puntales de otros partidos.

En Tijarafe, donde se han producido negociaciones entre todos los partidos con representación (CC, PP y PSOE) tampoco hay por ahora acuerdo. A pesar de ser la fuerza más votada y la que más concejales obtuvo, cuatro, CC podría ser desplazada de la alcaldía en caso de que PP y PSOE volvieran a repetir el pacto que firmaron entre 2011-2015. Eso sí, un contexto regional y nacional muy diferente al de entonces, dificulta a priori, la repetición de ese acuerdo. Tampoco es descartable que CC y PSOE vuelvan a gobernar juntos, como ya hicieron entre 2015-2019.

En Tazacorte, donde el 28-M no se produjeron mayorías, trasladar el pacto entre CC y PP es mucho más difícil, ya que entre ambos solo suman 3 concejales, lejos de los 6 necesarios para obtener la mayoría absoluta. Nueva Canarias, ganadora de la elecciones, no descarta tampoco llegar a acuerdos con otros partidos, ya que solo un concejal le separa de la mayoría.