El grupo de Gobierno en el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, formado por PSOE, PP y Ciudadanos, impulsó durante el pasado mandato la construcción de un aparcamiento desmontable en el Puerto capitalino con capacidad para 560 plazas de aparcamiento y que permitiría “la celebración de eventos y actividades de gran aforo”.

Pese a contar con la autorización por parte de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, de parte de la financiación con cargo al Cabildo Insular (1,3 millones procedentes de los fondos FDCAN), de ser adjudicado por 3,4 millones de euros a la empresa UTE Aparcamiento (Formada por Domingo J. Martín García y Montajes Metálicos Ingalux, S.L.) y de realizarse catas para el estudio del subsuelo, el gobierno salido de las pasadas elecciones municipales (PP y CC) ha decidido frenar su construcción.

Esta semana, en declaraciones a Cope La Palma, Asier Antona, alcalde de Santa Cruz de La Palma señaló que “el parking del muelle está parado, con gran responsabilidad por mi parte”. Antona indicó que “estaba muy avanzado, pero yo no acabé de verlo”, entre otros motivos por “elevar 4 metros de altura a la entrada de Santa Cruz de La Palma”.

El alcalde informó de que estaba “buscando alternativas de suelo” para aparcamiento en el municipio y que ya había contactado con el Cabildo para hacer uso de dos bolsas “de manera transitoria” en las zonas norte y sur del municipio.

Para el nuevo alcalde es necesario modificar el acceso a Santa Cruz de La Palma por la Avenida de Los Indianos, ya que considera que “uno no puede entrar a la capital de la isla, que decimos que es ciudad patrimonial, metido entre dos vías de vehículos. Porque también hay un informe de la Policía que habla de seguridad”.

El pasado mes de junio, el Foro Cívico de Santa Cruz de La Palma cuestionó públicamente este proyecto, afirmando que “se pretende instalar un mamotreto de hierro y cemento que difuminaría la entrañable silueta identitaria de nuestro antiguo puerto para conseguir unos pocos aparcamientos a coste de pagar una millonada por su construcción, un dineral por su actividad y mantenimiento y, además, supondrá la obligación de pagar por un espacio que hasta el día de hoy no se pagaba.”